Marta Robles: "Desde pequeña he sido una especie de agenda con dos patas"
¿Por qué deciste embarcarte en esta aventura?Desde pequeña he sido una especie de agenda con dos patas. Voy cogiendo los posavasos, las tarjetas, las arrugo... y luego las encuentro en un bolso y digo: ¡anda, si había cogido la tarjeta de este sitio! Lo hago siempre que viajo. Por ejemplo, de Nueva York, tengo una agenda divertidísima. Voy a hablar de muchas ciudades, y a la gente le va a divertir encontrar rincones peculiares.
Dime un restaurante romántico para una primera cita o declaración de amor...
Me encanta El Viejo León, un bistro francés con más 20 años que
era punto de encuentro de los espías. Es curioso porque parece que nada ha
cambiado y tiene muchísimo encanto. También adoro Sacha. Es un
sitio maravilloso, comes fenomenal, con las mesas art decó, mantelitos
de encaje... todo maravilloso. Es muy agradable porque tiene la luz muy bajita,
y en verano hay una terraza tan bonita... ¡no te puedes ni imaginar!
¿Y un restaurante algo más asequible?
Para una pareja más informal y que le guste estar rodeada de farándula me parece romántico y gracioso Caripen. Cierra tardísimo y puedes ir después del cine, del teatro o de la ópera. Tiene una atmósfera romántica pero decadente y nunca sabes qué famoso puede estar cenando ahí.
¿Y un restaurante algo más asequible?
Para una pareja más informal y que le guste estar rodeada de farándula me parece romántico y gracioso Caripen. Cierra tardísimo y puedes ir después del cine, del teatro o de la ópera. Tiene una atmósfera romántica pero decadente y nunca sabes qué famoso puede estar cenando ahí.
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