Cierra los ojos... y piensa en el verano
Si la tristeza otoñal te afecta al ánimo de tal manera que ni el deporte, ni tu mejor música, ni los baños de lujo ni montones y montones de chocolate te terminan de animar, solo queda una cosa que hacer: cierra las puertas de tu casa, cierra los ojos y piensa en el próximo verano.
¡El verano siempre vuelve! Y para cuando lo haga, estarás preparada. Usa tu tiempo para investigar las tendencias de moda de la próxima temporada, para planear las mejores vacaciones de verano de tu vida o para pensar en qué comida llevarás al primer picnic del año.
La preparación a veces es mejor que el plan en sí mismo. Y, en lo que imaginas todo lo que harás, estarás demasiado ocupada para que la tristeza otoñal pueda contigo.
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